Amor a distancia, ¿es posible?

Por más que los avances tecnológicos hayan acortado las fronteras a través de la comunicación y vivamos en la era de la hiperconexión, asumir una relación a distancia implica grandes retos, inclusive, mayores a los de una relación convencional. Piénsalo, si las cosas se complican a niveles insospechados en una relación presencial –por así llamarla–, cuanto más a kilómetros de distancia.

Muchas personas han desistido de creer en el amor a distancia y no es algo de extrañarse. Esto responde a que las relaciones a distancia tienden a aumentar de manera exponencial los problemas –propios y de pareja– presentes de antemano en la misma.

Es decir, si en una relación hay celos, desconfianza, inseguridad, desacuerdos, infidelidad, falta de comunicación o [inserta el nombre del problema aquí]; la distancia solo agravará estos conflictos. Pero no siempre tiene que ser así.

Cuando hay amor verdadero de por medio, todo es posible.

Sé que suena a utopía, pero no. Enfatizo este punto porque sí es factible llevar una relación a distancia exitosa, claro, siempre y cuando esté bien fundamentada, ambas personas estén claras en la visión que tienen de la misma, estén comprometidos entre sí y sean convenientes las condiciones en las que se desarrolla la relación.

Como verás, hablo de cuatro puntos específicos: fundamento, visión, compromiso y condiciones. Te explicaré a qué me refiero…

Fundamento

Sobre el fundamento, bueno, ese es un tema que hemos tocado varias veces en nuestro blog (en mi post pasado, «enamórate sin equivocarte», lo desarrollo a fondo). Verás, el amor es mucho más que un sentimiento, de hecho, es lo que prevalece –o se desvanece– cuando el boom del enamoramiento pasa, por lo que es una decisión que amerita ser renovada cada día.

Decir esto es fácil, pero en la práctica –y aún más, con el tiempo– puede volverse todo un reto. Por eso sostengo que la esencia del amor verdadero es Dios, pues, nos enseña a amar como sólo Él sabe hacerlo, es decir, de una forma que siempre logra vencer y “nunca deja de ser” (lee 1 Corintios 13:4-7).

Aunque la convivencia es importante para pulir y afianzar muchos aspectos de la relación de pareja; en el amor a distancia el fundamento es imprescindible para que no prevalezca la necesidad del uno por el otro, sino el objetivo en común. Esto nos lleva al siguiente punto:

Visión

Nadie empieza una relación pensando que algún día acabará para que luego cada quién rehaga su vida por su lado, ¿o me equivoco? La visión de toda relación formal debería estar encaminada hacia establecer un futuro juntos, y para que esto suceda, tarde o temprano la distancia física no podrá tener más cabida.

Si estás en una relación a distancia, pregúntate: ¿qué tan bien conoces a tu pareja?, a juzgar por lo que has leído hasta ahora, ¿está bien fundamentada su relación?; ¿ambos comparten la misma visión de la relación que sostienen?, ¿planean un futuro no muy lejano juntos? La respuestas a todas estas interrogantes hablarán mucho sobre qué tan consistente es la visión que ambos tienen como pareja.

Una relación a distancia se vuelve efímera cuando carece del sentido y rumbo que aporta la visión, por lo que su único destino es el fin de la misma.

Compromiso

Además del fundamento y la visión, para que el amor a distancia funcione es necesario que ambas partes asuman un compromiso por igual, ya que por mucho que ambos compartan la fe y una visión, el 100 % de una persona no bastará para mantener a flote una relación que es de dos.

Condiciones

No es lo mismo hablar de una relación de pareja que solo ha subsistido en el ámbito digital –es decir, que ni siquiera se conocen personalmente–, a una relación de noviazgo que empezó siendo común para luego migrar a una relación a distancia, o bien, a un matrimonio que se vio en las mismas condiciones.

Las condiciones en las que el amor a distancia tiene lugar hablan mucho de sus posibilidades de éxito.

Las posibilidades de fracasar en el amor a distancia son mayores cuando ambos no se conocen y solo mantienen contacto por medio de la tecnología. Por lo general, estas relaciones se caracterizan por ser largas –de años, inclusive– y que no avancen con el tiempo, es decir, que no se conozcan personalmente ni fijen objetivos, es una muy mala señal ya que en el mundo digital cualquiera puede inventarse una identidad o una vida (por supuesto, hay excepciones, pero son contadas).

En el caso de un matrimonio, puede funcionar sólo si la separación geográfica es por mutuo acuerdo y con un fin en común, por un período no muy prolongado y si ambos trabajan duro para que la separación física no derive en una separación espiritual y emocional; ya que el orden de Dios para los matrimonios, según su palabra, es que prevalezcan juntos como lo que son, “un solo ser”, (lee Génesis 2:24).

Si actualmente tienes una relación de pareja a distancia, te daré algunas recomendaciones generales:

• Si te vas a enamorar, hazlo con inteligencia. Sea que conozcas personalmente o no a la otra persona, ocúpate de hacer todo lo posible por conocerle bien antes de endosar tu corazón de buenas a primeras.

• Recuerda que las relaciones a distancia maximizan los problemas propios y de pareja. Con esto quiero decir que evalúes bien el status actual, primero, de tu corazón y luego, de tu relación, con el fin de determinar si ambos están en la capacidad de llevar un amor a distancia sin volverlo tóxico, porque lo que empieza mal, termina mal.

• Las relaciones a distancia pueden fomentar la codependencia. Recuerda que tienes una vida que no puedes malgastar por estar pegada al celular o a un computador en un intento desesperado por “estar juntos” ante todo. Eso no está bien, no es sano para ti y va en contra del fundamento de una relación sana.

Por último y por sobre todas las cosas, pon tu corazón y tu relación en manos de Dios cada día. Cuando estás bien con Dios y Él es tu centro, automáticamente todo en tu vida toma el lugar que le corresponde. Recuerda que la verdadera bendición de Dios enriquece y no trae tristeza con ella.

#MujerInspírate

¿Qué opinas?

Andrea Colina

Comunicadora Social/Periodista. Escribo, luego existo. Amante del buen cine y de los retrogames. Creativa por gracia multiforme.
JESÚS: mi verdad absoluta.

You May Also Like

mujer joven baila mientras sonríe mirando al cielo - quiero bailar con Dios

Quiero bailar con Dios

mujer con las manos sobre su pecho - cómo sanar a tu niño interior

Carta abierta: Cómo sanar a tu niño interior

¿Cómo mantener el bienestar emocional en tiempos difíciles?

Mujer envidiosa cómo saber si sientes envidia combátela en 4 pasos

¿Cómo saber si sientes envidia? Combátela en 4 pasos

error: Content is protected !!