¿Cómo afrontar la timidez?
Quizás haya personas que a primera vista te tilden de antipática, abstraída o aburrida, sin saber que no es esa tu realidad. Sólo tú sabes que, a puertas cerradas, no se trata de mostrarte inaccesible, sino de una lucha silente y dolorosa que libras contra la timidez para poder relacionarte con otros como deseas.
En el mundo de la psicología, la timidez se define como una situación de incomodidad que se vive ante ciertas situaciones sociales.
Por lo general, detrás de la timidez se enmascaran diversos problemas, como la inseguridad, baja autoestima, ansiedad y/o miedo.
Es por ello que las personas tímidas se caracterizan por experimentar incomodidad a la hora de relacionarse con otros o al estar en ambientes sociales; también pueden sentir vergüenza de sí mismos y le dan excesivo valor a la opinión que los demás tengan de ellos, lo que acarrea altos niveles de ansiedad que pueden derivar en fuertes miedos. Aunado a ello, todo este cúmulo de emociones se refleja a nivel físico, por lo que muchas personas tímidas pueden tartamudear, paralizarse, quedarse sin palabras y en casos extremos, hiperventilar o huir de la situación que les incomoda.
Ahora bien, es importante que no confundas timidez con introversión.
Verás, a diferencia de alguien tímido, el introvertido se caracteriza por necesitar tiempo a solas y no le suele importar lo que piensen los demás al respecto, pues, se siente bien consigo mismo siendo de esa manera. En cambio, la persona tímida tiene la necesidad de relacionarse y sí, necesita compañía, solo que los nervios y la preocupación por la forma como los demás la perciben, generan en ella limitaciones para socializar. Por ello, el rasgo más característico de ser tímido es esa excesiva percepción que se tiene de sí mismo.
Esto se debe a que la persona tímida siempre tiende a pensar en sí misma como parte de un grupo más grande de individuos y por ende, suele pensar que todo el mundo tiene una percepción determinada sobre sí.
Entonces, ¿cómo puedo combatir la timidez?
- Descubre quién eres realmente. No se trata de que intentes ser como esa chica extrovertida que tanto admiras ni comportarte como alguien que no eres. Se trata más bien de encontrar ese punto de equilibro donde te sientas cómoda en tu propia piel y puedas decir: “Sí, ¡esta soy yo!” Así que mira hacia tu interior, analízate, descubre lo que te gusta de ti y no, lo que quisieras cambiar y no, y sé fiel a ti. Digo esto porque quizás descubras que eres una persona introvertida y ¡eso está muy bien!, pero si no estás clara en quién eres, a la hora de trabajar contra la timidez pudieses estar intentando inconscientemente adoptar la actitud de alguien que no eres, y no es eso lo que queremos.
- Alimenta la confianza en ti misma. Como bien dije más arriba, la timidez es el resultado de varios problemas, como la inseguridad, la baja autoestima y el miedo; por ello es vital que trabajes en tu interior a fin de alimentar la confianza en ti misma. A continuación, enlistaré una serie de artículos relativos a estos temas –que ya hemos tocado en nuestro blog– y en donde encontrarás las herramientas precisas para combatirlos:
[tw-divider][/tw-divider]
¿Cómo puedo aprender a valorarme?
¿Cómo puedo mejorar mi autoestima?
Cinco hábitos que destruyen tu autoestima
¿Cómo aumentar la seguridad en ti misma?
6 estrategias para alimentar la confianza en ti misma
[tw-divider][/tw-divider]
- Cambia tu forma de pensar. Con esto me refiero a que debes cambiar tu enfoque, es decir, olvídate un poco de ti misma, de lo que sientes y concentra tu atención en la persona que tienes al frente, en lo que ocurre en el exterior, a tu alrededor y no en lo que ocurre en tu interior ni en suposiciones de lo que los demás están pensado de ti; créeme, los ojos del mundo no están puestos sobre ti, aunque así lo sientas. Tampoco sobrevalores la opinión de otros, pues, siempre habrán personas a las que no les parecerá tu forma de ser o pensar; ¡eso está bien y es perfectamente normal!
- No permitas que la incomodidad te paralice. La incomodidad siempre estará presente en algunas interacciones sociales –como salir en una cita o presentarte ante un grupo de compañeros de trabajo o estudio– y eso es normal, pero como sé que la incomodidad es algo constante en las personas tímidas, lo importante es que no permitas que te paralice. Si no te atreves a hacer cosas nuevas, no podrás superar tus miedos y descubrir que estos eran infundidos; así que ponte pequeños retos que puedas cumplir a diario, como acercarte a alguien a pedir información sobre algo, o saludar a alguien que te topes a diario y preguntarle por su día.
- Practica constantemente y asegúrate de avanzar, aunque sea lento el progreso. Acompaña el trabajo interno con pequeñas acciones que lo respalden. Nunca huyas de las situaciones que te incomodan ni las evites, ya que eso sólo logrará fortalecer tu timidez. ¿Quieres cambios?, entonces necesitas atreverte a dar pequeños pasos. No te preocupes si nada sale como lo tienes pensado, de hecho, si lo deseas, hazle saber a las personas con las que hables que te encuentras “en medio de un experimento para contrarrestar la timidez” y ríete siempre de ti. Recuerda que esto requiere práctica, constancia, determinación y mucha actitud.
- Y si la timidez es extrema… Es decir, si tus problemas para relacionarte están afectando tu calidad de vida y has desarrollado temores tan fuertes que te han llevado a abstraerte, al punto de rozar la fobia social; lo mejor es que busques ayuda especializada con un psicólogo para superar el problema; porque sí, aun a ese extremo, la timidez puede ser superada.
#MujerInspírate
